Lugar de encuentro de Marcelino y los primeros Hermanos
En agosto se ha iniciado la tercera etapa hacia el Bicentenario Marista, llamada “La Valla”. Revisa los detalles de este nuevo período.
Próximamente nuestro Instituto cumplirá 200 años y es recorrido en tres etapas, que marcan el horizonte del Mundo Marista y la relación entre Hermanos y Laicos. “La Valla” es la tercera etapa que se centra en el espacio interior, la dimensión mística personal y la preparación del próximo Capítulo General.
“Este año es una invitación a cultivar la dimensión mística de nuestras vidas: El encuentro con Jesús, pan de vida, para que también nosotros podamos contagiar vida en plenitud a nuestro alrededor”, comenta el Superior General Marista, Hno. Emili Turú.
En el primer hogar de los Hermanos, ubicado en La Valla, Francia, se fundó nuestra Congregación, un 2 de enero de 1817. El icono de la etapa es la mesa de ese hogar, lugar de encuentro, compartir fraterno y alegre entre San Marcelino y los Hermanitos de María.
“En la planta baja se encuentra la famosa mesa de nuestros orígenes, que representa el símbolo de la fraternidad. En torno a esta mesa se sentaron el P. Champagnat y los primeros Hermanos. Hoy esta mesa se ve enriquecida con la presencia no sólo de Hermanos, sino también de Laicos y Laicas Maristas, llamados a construir una Iglesia de rostro mariano”, agrega el Superior.
Desde nuestro Sector recibimos este año llenos de esperanzas en los horizontes de futuro que tiene el Instituto Marista.
El Representante del Provincial para la Misión, Ernesto Reyes Plaza, entregó un mensaje a toda la comunidad chilena: “Les deseo una intensa vivencia personal al adentrarse en la historia de los orígenes del Carisma y de la Misión Marista, en compañía del reloj que va a marcar los tiempos en que Champagnat y sus Hermanos hace 200 años cultivaban la herencia que hemos recibido de sus vidas”.
Juntos tenemos el desafío de seguir avanzando en salir a las periferias con actitud de servicio e iglesia de delantal, para así llegar a la celebración del Bicentenario con el nacimiento de una nueva tierra.